sábado, 4 de junio de 2016

¿Quién es quién?: Un alcalde crea un proyecto de futuro con motivo de la "dificultad patrimonial y de accesibilidad", el otro "entra en descalificaciones".

El exalcalde de Setenil defiende la viabilidad del "macroparking"

Asegura que, pese a su coste, era la solución para una localidad con una enorme "dificultad patrimonial y de accesibilidad"

P.I. Cádiz Actualizado 24.05.2016 - 05:01



     Cristóbal Rivera, alcalde de Setenil de las Bodegas entre 1983 y 2015, defendió ayer el proyecto ya finalizado de un "macroparking", en relación con la población, de más de 170 plazas y que fue definido por su sucesor, el andalucista Rafael Vargas, como "nuestro aeropuerto de Castellón". El coste de este aparcamiento subterráneo ha sido cercano a los siete millones de euro y fue diseñado por el prestigioso despacho de arquitectos Martínez Lapeña y Elías Torres. Ahora el Ayuntamiento tendrá que reembolsar a la Junta 750.000 euros, que es lo que debería haber sido su participación en esta obra.

     Rivera considera que el proyecto no invade la visión de la zona y que "no estamos hablando de la fachada del pueblo, sino de su trasera. Por la propia trama urbana del pueblo, existe una dificultad de accesibilidad. Este equipamiento se pensó en el año 83, pero propiamente no se inició hasta el año 2006. Es verdad que ha habido muchas dificultades, pero ofrece soluciones no sólo para los turistas que acuden a nuestro pueblo, sino también a la comodidad de vecinos que, por las características del pueblo, no pueden contar con garajes en sus casas".

     Según Rivera, lo deseable sería que el caso histórico del pueblo, uno de los más pintorescos de la provincia, quedara liberado de coches y que el parking estaba, además, pensado para "evitar el despoblamiento del caso histórico".

     También quiso mostrar su opinión acerca de otra obra criticada por el actual alcalde, que era complementaria de la del aparcamiento subterráneo. Se trata de la que realizaron con fondos de Diputación y la Confederación Hidrográfica a la vera del río. Se trataba de un paseo que una avenida de las aguas destrozó poco después de que estuviera terminada. Reconoce que estuvo mal diseñada, pero recuerda que se convenció para que se realizara un segundo proyecto, tras enterrarse un millón de euros, en el que el paseo se eleva varios metros por encima del río.

     Tanto sobre una obra como sobre la otra, y también sobre la rehabilitación de la Iglesia, quiso recordar que "yo soy licenciado en Derecho y no me atrevo a hablar de las cosas que no conozco, Cualquiera de los trabajos que se han realizado con el pueblo han contado con la supervisión de comisiones de expertos y me parece muy audaz por parte del nuevo alcalde enmendarle la plana a personas que son profesionales y que, de una manera y otra, han contribuido a mejorar las infraestructuras de Setenil. Un alcalde no debe entrar en descalificaciones, no es ese su trabajo".